El cine documental cubano… desde el espacio del Cine Club

                                 

“El cine documental cubano siempre ha sido revolucionario, en el amplio sentido de la palabra. Desde sus presupuestos estéticos y éticos lo ha sido, y después de 1959, además, ha acompañado a las voces menos visibilizadas y al proceso social en sí. Ha sido un cine de vanguardia, aun cuando no pocos temas de nuestra realidad poco o nada se abordaron en un momento y hoy emergen, desde distintos puntos de vista”.

Así se expresó el cineasta e investigador Jorge Luis Sánchez durante el conversatorio que reabrió las puertas de La Casa del Festival en La Habana para retomar su espacio mensual Cine Club Festival, el pasado viernes 31 de marzo.

Cada encuentro, guiado por una temática específica dentro de nuestro cine, incluirá también una proyección. En esta ocasión fue elegido el documental Una manera de existir, de Lenia Sainiut, producido por la Televisión Serrana y merecedor del Gran Premio en la XX edición del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez In Memoriam.

Jorge Luis Sánchez, autor de los libros Movimiento cubano de cine documental (Ediciones Icaic, 2009) y Romper la tensión del arcoMovimiento cubano de cine documental (Ediciones Icaic, 2010), es además un connotado realizador de obras de este género (Dónde está CasalEl FanguitoLas sombras corrosivas de Fidelio Ponce, aúnNunca será fácil la herejíaDentro de cincuenta años y Cero en conducta, entre otros), así como de largometrajes de ficción (El BennyCuba LibreIrremediablemente juntos y Buscando a Casal).

Fundador de la Federación Nacional de Cine Clubes de Cuba, Jorge Luis Sánchez prefirió hacer una especie de viaje desde el pasado y hasta el presente para recordar hitos del documental en el país, figuras representativas del género y reflexionar en torno a las demandas que el público posee en la actualidad, con respecto a la producción y la existencia de espacios para la proyección de obras de este tipo. 

En una entrevista fechada en 2014, quien también presidiera la Muestra de Cine Joven del Icaic durante 8 años, expresó que “a pesar de existir el Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez In Memoriam, donde mejor salud tiene ahora mismo el documental cubano es en la Muestra Joven del Icaic (…) porque este es un género que no se puede asumir con cansancio, tiene que ser una revelación, tiene que existir una gran pasión, una realidad que te sacuda para expresarla desde el punto de vista documental. Al parecer son los más jóvenes los que están al frente en estos momentos. También está el ejemplo de Suite Habana en que Fernando Pérez, un cineasta reconocido, nos entregó este filme magnífico. Su talón de Aquiles está en su exhibición, que no llega al público como debe llegar para ser apreciado como merece”.

Justamente durante el conversatorio se insistió en la necesidad de crear y mantener un espacio que permita exhibir la documentalística cubana, no ya sólo la televisión que, en definitiva, coloca determinadas obras en su programación, según intereses de otra índole.

“El cine documental cubano siempre ha sido revolucionario, en el amplio sentido de la palabra. Desde sus presupuestos estéticos y éticos lo ha sido, y después de 1959, además, ha acompañado a las voces menos visibilizadas”.

El pedagogo —siendo esta su primera disciplina estudiada— abundó en el cine documental cubano antes de 1959, mencionando a Jocuma o El Cabo de San Antonio (1955) y La cooperativa del hambre(1957), de José A. Sarol. De manera especial, se refirió a El Mégano con estas palabras: “realizado por Julio García Espinosa con la colaboración de Tomás Gutiérrez Alea, quienes además fueron sus guionistas junto a José Massip, digamos que es el principal antecedente de un cine con conciencia social y artística, por su carácter surrealista, para lo que se hizo después de 1959”.

Luego agregó “Esta tierra nuestra, de Tomás Gutiérrez Alea; La vivienda y Sexto aniversario, de Julio García-Espinosa; y Construcciones rurales, de Humberto Arenal, son ejemplos de esa obra inicial como parte de un proceso que quería mostrar el sentir del pueblo al calor de lo que se construía y no dejar de recoger los sucesos y hechos del mundo contemporáneo. Posteriormente el Noticiero Icaic Latinoamericano narraba los principales acontecimientos en el país y en el extranjero, por iniciativa de Santiago Álvarez, quien ha trascendido como un referente imprescindible del cine documental cubano, aunque no el único”.

Sánchez mencionó además a Oscar Valdés, a Nicolás Guillén Landrián, a Bernabé Hernández, a José Massip, a Humberto Solás, a Héctor Veitía, a Octavio Cortázar y a Sara Gómez, y justo hubiera sido que también nombrara a Néstor Almendros, a Manuel Octavio Gómez, a Rogelio París, a Sergio Giral, a Alejandro Saderman,a Enrique Colina, entre otros muchos.

“Fueron osados… —añadió—. Aquellos primeros documentales de nombres que hoy son referencia obligada en nuestro cine fueron atrevidos, arriesgados. Ellos, sus directores, se arriesgaron en lenguajes y elementos cinematográficos a partir de lo que los estándares clasifican como defectos, quizás. Muchos críticos etiquetaron la década del 60 en Cuba como la época de oro del documental cubano, y hasta cierto punto es lógico porque los inicios siempre son marcadamente atrevidos, además de que el contexto condiciona inquietudes creativas distintas. Sin embargo, los años 70, 80, 90 también reúnen obras importantes, tanto en formato de cortometrajes como de largometrajes”.

En poco tiempo es imposible hablar con toda la profundidad requerida sobre la obra cubana en torno al documental y a sabiendas de ello, Sánchez intentó no omitir lo más representativo, “como Suite Habana, donde Fernando Pérez mezcló magistralmente también los códigos estéticos del cine de ficción, y que merece ser analizada en tanto marcada obra de autor”.

Quien se iniciara en el Icaic como asistente de dirección en filmes como BaraguáClandestinosUn señor muy viejo con unas alas enormes y El verano feliz de la señora Forbes, dedicó unos minutos en su conversatorio a hablar de la Televisión Serrana, “apurándome en el tiempo, obviando tantas cosas, pero consciente de su importancia aunque no la mencione”.

Partiendo de esa herencia de Santiago Álvarez es que surge en la década del 90 este proyecto que, aunque se denomina televisión, mucho ha apoyado la realización de documentales para cine, a partir de la iniciativa de Daniel Diez. “Es una consecuencia o una continuidad del legado de Santiago, con una línea propia de trabajo y reafirmándose como el canal identitario más poderoso que esa comunidad del Oriente cubano posee”.

Es la Televisión Serrana la voz de una región, y se empeña en acompañarla en sus procesos sociales, económicos, artísticos y en general, existenciales. “Ha sido un acertado proyecto que tendrá mucho que contar a lo largo del tiempo”, concluyó Jorge Luis Sánchez

“Es la Televisión Serrana la voz de una región”.

Antes de la proyección del documental Una manera de existir, el cineasta Pablo Massip deseó enfatizar en aquella producción documentalística que ha aportado tanto a la obra del género en el país desde los Estudios Cinematográficos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (ECITVFAR), los Estudios Cinematográficos de la Televisión e incluso la Cinematografía Educativa del Ministerio de Educación (Cined), que hasta los años 90, eran los otros productores mayoritarios de documentales en Cuba. “No solo hubo didactismo en esos trabajos, y buenos ejemplos los tenemos con Ernesto Daranas y Alejandro Gil, que partieron de esas experiencias y que hoy muestran una obra artística importante”. Asimismo, compartió su preocupación en torno al hecho de que no pocos de las nuevas generaciones desconocen gran parte del cine cubano, o solo conocen la que, quizá, es la más mencionada o referida. Tomó como ejemplo una vivencia personal que lo inundó de gran asombro al encontrarse a una persona que desconocía, por ejemplo, El Ñame, de Enrique Pineda Barnet.

“Eso es lo que sucede cuando, entre otras razones, no disponemos de un espacio fijo para la difusión de toda la obra cubana en cuanto al género documental. Un cine cualquiera que pueda elegirse puede convertirse en ese espacio, y producción cubana hay suficiente para que la cartelera se mantenga viva. Tanto se ha hecho en materia de documental en el país que merece ser visto y aprendido, además de lo que va haciéndose en la actualidad”.

El público asistente disfrutó entonces durante 33 minutos del documental acreedor del Gran Premio en la XX edición del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez In Memoriam, que a la razón del jurado (Alejandra Guzzo, de Uruguay, como presidenta, y los otros dos miembros: Roberto Rivero Ramos y Luis Abel Oliveros, ambos de Cuba) lo recibe “por la sensibilidad con la que aborda una historia de vida singular, que ocurre en las montañas de la Sierra Maestra, y por la particular agudeza con la que construye un documental a partir de un testimonio, haciendo uso de la riqueza del lenguaje audiovisual…”.

Enhorabuena vuelve el espacio mensual Cine Club Festival en La Casa del Festival en La Habana.

Tomado de La Jiribilla

El Conservatorio de Música Esteban Salas y el Festival Santiago Álvarez crean nuevas alianzas

                                 

Entrevista a Margarita Vaillant, directora del conservatorio

Por: Fiorella Franco


Una nueva edición del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez in Memoriam llega a la ciudad caribeña de Santiago de Cuba desde el 3 y hasta el 8 de marzo. Son muchas las instituciones que acogen el evento, como cada año. Sin embargo, esta 20 edición contará además con el apoyo y acompañamiento del Conservatorio de Música Esteban Salas. Su directora, Margarita Vaillant, conversó acerca de este vínculo entre el festival y la escuela y lo que estará aconteciendo en la institución durante estos días.

Margarita afirma que el conservatorio está muy orgulloso de poder participar en esta ocasión de manera directa en el Festival Santiago Álvarez.  Considerándolo de gran importancia para la cultura de nuestro país, además de como una vía que tienen los jóvenes de acercarse al quehacer artístico y revolucionario de Santiago Álvarez.

“Tendremos la dicha de contar dentro de la programación, el domingo 5 de marzo a las 3:00 pm con un intercambio de clases magistrales con dos músicos percusionistas norteamericanos. Ellos han basado su obra fundamentalmente en el audiovisual. Los estudiantes tendrán la oportunidad de escuchar en sus propias voces como se ejecuta y la importancia que tiene la música como base en un trabajo audiovisual. Tendremos además la oportunidad de mostrarles a ellos que a pesar de todas las limitaciones que tenemos en el país, todavía la enseñanza artística, y sobre todo aquí en Santiago de Cuba, con mucho amor y mucha dedicación, logramos todavía la formación de nuevos talentos de la música”.

Este encuentro surge a raíz de una visita que realizara a Santiago de Cuba Teresita Herrera, coordinadora general del festival, y que se transformó en un vínculo entre el Conservatorio Esteban Salas y el evento. Partiendo del interés de Teresita Herrera de conocer la escuela de música, Margarita Vaillant tuvo la oportunidad de mostrarle algunas de las manifestaciones de los géneros que se cultivan en la ciudad. La visitante quedó maravillada con el talento de los estudiantes. De esa manera comenzó una buena amistad en el orden personal y en el profesional, que ha permitido a la institución abrirse camino en el mundo del documental.

“Hemos querido vincular el documental a la música, pues realmente son dos eslabones fundamentales que no se pueden separar”.

El Conservatorio Esteban Salas es un centro regional que acoge estudiantes de toda la región Oriental. Según Margarita, muchos no han tenido la posibilidad de formarse realmente en el mundo de la documentalística, y esta resulta una oportunidad no solo de brindar la música que hacen en la institución, sino de que las nuevas generaciones puedan ser testigos del festival.

“Los estudiantes tienen la programación de todos los documentales que están en competencia. Gracias a lo cerca que estamos del cine Rialto, ellos se insertarán en esta programación, así como en las demás actividades que se estén realizando”.

Con una matrícula de 196 estudiantes, de ellos 114 internos, procedentes de las provincias centro orientales y de los municipios de Santiago de Cuba, el conservatorio responde a un programa de desarrollo de la música vigente hasta el año 2030. Con un programa centrado en las necesidades de cada territorio, realizan graduaciones en las diferentes líneas musicales. Cuentan además con todas las líneas de estudio, exceptuando las de laúd y canto lírico por falta de locales. Aún así, planean una futura extensión que permita insertar estas líneas de estudio para los estudiantes de la región que deseen estudiarla.

“Tenemos la dicha de ser el único centro de conjunto con la Escuela Nacional de Música que tiene abierta entre las líneas de formación la de asignaturas teórico musicales, y es por eso que nosotros también acogemos a estudiantes que hacen su pase de nivel optando por este tipo de formación y que son de la región oriental y de la región central también”.

La directora de esta escuela media de música hace énfasis en la participación de su institución en futuras ediciones del festival de documentales.

“Para la próxima edición ya tenemos pensado inscribir un documental sobre la vida musical santiaguera con la realización de la productora Guajiros Films. Un trabajo maravilloso que dura 45 minutos y consigue hacer un recorrido por todo el acontecer cultural de Santiago, y ahí por supuesto no podía faltar el conservatorio”.

Tomado del Boletín del 20 Festival Internacional Santiago Álvarez in Memoriam

Diálogos constantes del cine documental y la música

                                 

En la segunda jornada teórica del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez in Memorian se debatió sobre la realización de cine documental e influencia de la música cubana

Por: Rubén Ricardo Infante


Los encuentros teóricos son parte de la programación dentro de la vigésima edición del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez in Memoriam, cada mañana los participantes y asistentes al evento se encuentran con nuevos enfoques, experiencias y apreciaciones sobre la realización audiovisual y sus diálogos con otras artes.

El crítico y escritor Frank Padrón, antes de presentar a la realizadora y profesora Gloria Rolando, comentó sobre algunas de las características del cine documental realizado en EE.UU., las herencias de Santiago Álvarez para las jóvenes generaciones y la influencia del contexto político y social en las temáticas abordadas, así como el tratamiento conceptual.

Como parte de su exposición, la directora incluyó la proyección de fragmentos de los documentales 1912: Voces del silencio y Hermanas del corazón. El primero, referido a los Independientes de Color y su papel contra la discriminación racial, la equidad y la búsqueda de las historias ocultas en nuestra gente; y el segundo sobre la orden de las Hermanas Oblata.

Los fragmentos seleccionados por la directora muestran su interés por contar esas pequeñas historias de movimientos obreros, sindicales, religiosos y culturales; y las vivencias de muchos de nuestros antecesores.

Bajo el título “Historia e imágenes de nuestra gente”, Rolando expuso sus experiencias sobre la realización documental, los creadores que la han acompañado en la producción de sus obras y el apoyo que ha recibido por parte de instituciones como el ICAIC, la Casa de las Américas y universidades.

También refirió cómo se ha encontrado los temas y los protagonistas de sus documentales; y la utilización de un acucioso método de investigación para obtener la mayor información sobre esas obras, lo que ha permitido reflejar en pantalla verdaderos testimonios de nuestra identidad, historia y cultura.

En un segundo momento de la jornada, los participantes y asistentes a la Galería Oriente, sede del seminario teórico del Festival, pudieron escuchar la conferencia “Influencia de la música cubana en la música latina de New York”.

En su intervención, los músicos estadounidenses Antonio Nadal y Boby Sanabria comentaron los procesos de relación entre los ritmos propios de la sonoridad de la isla y cómo se han insertado en creaciones, géneros y temas de la música de origen latino en la ciudad de New York.

La segunda jornada teórica del Festival ha propiciado un diálogo con otras perspectivas que mezclan el documental y la música; los puentes culturales y las historias compartidas.

Union Maids: Una gran historia mínima

                                 

El documental fue exhibido durante la gala inaugural de la edición 20 del Festival Santiago Álvarez

Por: Bruno Díaz


La mejor película sobre la historia de los trabajadores que he visto jamás.

Howard Zinn

Union Maids (1976), dirigida por Julia Reichert y Jim Klein, es una historia de fundación, emancipación, empoderamiento, participación social y redención de las clases obreras. También vindica el abordaje de la historia como collage de testimonios mínimos, cotidianidades y experiencias. Esta película apuesta por que el discurrir de un mundo se conciba como la sumatoria de todas las vidas que generan y catalizan acontecimientos que luego recoge la historia, pero siempre a costa de sumir a los protagonistas en el anonimato multitudinario.

La masa como concepto es empleada por los poderes diestros y siniestros para anular la importancia del libre albedrío individual sobre el que se construyen los colectivos —vistos estos como consensos y pactos, nunca como grupos aturdidos que siguen ciegamente a líderes iluminados y carismáticos. En un grupo se ahogan los nombres y las identidades, las experiencias personales y los sentimientos. Por eso hay que nombrar, recordar hasta el último de sus miembros. Tarea tan bella como imposible. Utópica.

Los testimonios de Kate Hyndman, Stella Nowicki, Sylvia Woods, protagonistas del auge sindicalista estadounidense suscitado durante la década de 1930, a raíz de la gran crisis capitalista desatada en 1929 —y que solo pudo ser superada con iniciativas “socialistas”—, demuestra lo complejo de los procesos de toma de conciencia que se operan en un ser humano, en su camino a convertirse en militante y activista (como en el caso de las protagonistas de marras) de una causa colectiva. Así como el doble reto que supuso, y aun supone, para una mujer irrumpir en la esfera pública, entonces a pocos años de haber ganado el derecho a votar.

El triunfo sufragista en Estados Unidos fue más provocación que final feliz. Las perdices no se dejaron devorar tan fácilmente. La rejerarquización de la mujer en la esfera pública estaba solo comenzando, y su implicación en las duras bregas sindicales fue otro paso gigante hacia un rol aun no suficientemente consolidado, ni en esa nación ni en casi ningún lugar del mundo. Estas luchas eran el contexto ideal para que germinaran los primeros brotes de la causa feminista, aunque aún se pensara que estas lides eran cosa de hombres. Kate, Stella y Sylvia se hallaron siempre frente a una doble hegemonía, pues en los propios aliados podían hallar enemigos.

La película, de 54 minutos de duración, mixtura y contrasta los hasta entonces inéditos testimonios orales de las mujeres con imágenes de archivo de la época; el alegre ritmo de temas musicales agitprop con sonoridades folk contemporáneas. La música popular es subrayada como registro instantáneo de los procesos históricos en ciernes. Crónica, testimonio y huella indeleble a través del tiempo.   

Union Maids fue la tercera colaboración entre Reichert y Klein, que ya habían dirigido previamente Growing Up Female (1971) y Methadone: An American Way of Dealing (1975). La pobre distribución y exhibición en las salas nacionales de Growing Up Female propició la fundación de New Day Films, una compañía aún vigente, con la que Reichert, Klein y las cineastas feministas Amalie Rothschild (It Happen to Us) y Liane Brandon (Anything You Want to Be) buscaron solucionar la promoción de sus obras, localizadas al margen de la gran industria. Otra historia de emancipación y empoderamiento paralela a la abordada por el documental.

Tomado del Boletín del 20 Festival Internacional Santiago Álvarez in Memoriam

Inicia Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez In Memoria + Boletín#1

                                 

Desde hoy y hasta el venidero 8 de marzo transcurre en la ciudad de Santiago de Cuba la edición XX del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez in Memoriam con una muestra especial del cine documental independiente estadounidense

Luego de dos años de confinamiento y trabajos no presenciales debido a la pandemia del COVID-19, vuelve a la urbe santiaguera, sede habitual del evento, el Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez in Memoriam. Para su presidenta, Lázara Herrera: “Será este un regreso de elevadas expectativas, porque volvemos a las salas de cine con un festival concebido a la altura del legado de quien fuera uno de los más grandes creadores de este tipo de cine”.

Herrera se refirió además, en conferencia de prensa previa al certamen ofrecida en el Centro Multicultural El Ingenio, que se aunaron esfuerzos para formalizar la presente edición con un formato habitual. En esta ocasión se inscribieron al concurso 138 obras de 31 países, de las cuales fueron escogidas 17 en competencia.

En la muestra seleccionada resalta la diversidad de la realización audiovisual en cuanto a estilos, lenguajes y temas. Destacan temáticas como: la música, la diversidad sexual, el ámbito familiar y las vivencias durante la pandemia, entre otros.

Por otro lado, las actividades teóricas y culturales a celebrarse en el marco del Festival serán acogidas por instalaciones como: los cines Rialto, Turquino y Caney, la Universidad de Oriente, el Museo de la Imagen Bernabé Muñiz Guibernau y la Galería Oriente.

Para la coordinadora general del Festival, Teresita Herrera, la edición actual sobresale por la calidad de las obras concursantes. Son ejemplo de ello: la dedicada a la temática LGBTIQ+, una conformada por obras realizadas por mujeres, y en especial la muestra de documentales independientes de Estados Unidos a quienes está dedicado el certamen.

Directores, realizadores, productores y aficionados debatirán sobre el arte del documental y la impronta de Santiago Álvarez. Foto: Carlos Daniel Carrillo Herrera.

Como parte de las celebraciones y reconocimientos, se distinguirá el 30 aniversario de la creación de la Televisión Serrana y al Comité Provincial de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, fundado hace 45 años.

Descargar Boletín 1 del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez In Memoria

Identidad, historia y formas de la realización documental

                                 

El programa teórico de la vigésima edición del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez in Memoriam abordará diferentes aspectos de la realización, figuras de la historia y procesos de la identidad nacional cubana


Por: Rubén Ricardo Infante

El próximo 3 de marzo iniciará en Santiago de Cuba, la vigésima edición del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez in Memoriam y en su programa se incluye una serie de encuentros teóricos que propiciará el enriquecimiento profesional de los asistentes al evento en aspectos que transitan desde el arte del documental, el tratamiento de la historia en la obra documental de Santiago Álvarez y la manera en que abordó la figura de José Martí.

Cada uno de estos encuentros, cuya sede es la Galería Oriente, comenzarán a partir del propio día 3 y se extenderán hasta el 7 de marzo; donde el poeta y crítico Frank Padrón fungirá como moderador del programa teórico del evento.

El profesor y documentalista Jorge Fuentes se encargará de abrir las sesiones teóricas del Santiago Álvarez, y exponer sus consideraciones acerca de cómo el documental aborda la relación entre verdad y realidad, un tema que permitirá debatir sobre las formas del documental al asumir hechos y contarlos desde la matriz de una cámara.

El cine, como cualquier arte, expresa una realidad desde la perspectiva del director. Los vínculos entre el documental y el hecho están permeados por juicios, matices, apreciaciones… que hacen que la perspectiva sea una característica propia de acuerdo a los presupuestos o nociones personales.

Fuentes ha desarrollado una amplia y sostenida obra documental y ha concentrado esfuerzos en investigar sobre el difícil arte de la realización documental. Un ejercicio que ha adquirido desde la práctica y donde sus experiencias ofrecerán nuevas consideraciones y criterios a tener en cuenta para quienes asumen el lenguaje del documental como forma para expresar en imágenes hechos de la historia, la cultura y la sociedad.

Como homenaje al creador de un proyecto de gran significación en la historia audiovisual cubana, el Noticiero ICAIC Latinoamericano, también se debatirá en torno al tratamiento de la historia en la obra documental de Santiago Álvarez por la profesora Aida Morales y cómo la presencia de José Martí es motivo recurrente en la obra del director de Now!, punto de partida para el debate que propiciará la profesora Martha Fuente.

El Noticiero ICAIC Latinoamericano, informativo fílmico semanal creado por Santiago Álvarez, arriba a su 63 aniversario.

También con una extensa obra, la profesora y realizadora Gloria Rolando ofrecerá el día 4 de marzo sus experiencias en los procesos de investigación que son parte esencial en el desarrollo de una obra documental. Para Rolando, el ejercicio creativo se sostiene en la búsqueda de las historias que guardan los personajes comunes, la gente sin historia.

En esa búsqueda de las esencias, la realizadora que arribó a sus siete décadas de vida y casi la mitad de su vida dedicada a la realización, ha trazado un mapa sobre nuestras raíces, desde los vínculos y herencias de la cultura africana en nuestra configuración como nación, hasta indagar en nuevas historias y personajes de la cultura cubana.

Para ese día, se suma la conferencia de los músicos estadounidenses Antonio Nadal y Boby Sanabria, acerca de la influencia de la música cubana en la música de origen latino en la ciudad de Nueva York. Muchos estudiosos consideran que la música cubana es la verdadera esencia de la cultura de la Isla, más allá de las discusiones que esta aseveración podría generar, lo cierto es que constituye una manifestación que expresa la identidad, la cultura, la tradición y la historia de Cuba.

Con el mismo afán de desentrañar las figuras de nuestra historia, en la jornada del día 5 de marzo el investigador Heriberto Feraudy se adentrará en José Antonio Aponte, a quien considera el gran desconocido. El carácter insurgente de Aponte le valió su inserción en la historia nacional, sin embargo, no ha sido lo suficientemente abordada desde los estudios históricos, culturales o dedicados a figuras en específico.


En la segunda parte del programa teórico de esa jornada, un grupo de realizadores integrantes de Meerkat Collective expondrán sus estilos en la producción colectiva y su inserción en ámbitos comunitarios.

Desde la calle Heredia, en la Galería Oriente, también habrá espacio para debatir en torno a las metas y retos del activismo feminista en la Cuba actual, un tema que propone la profesora Taïna Barthel; y en un segundo momento de esta jornada del Festival, a través de un panel integrado por los realizadores Pamela Sporn, Catherine Murphy, Jim Klein y Tony Eriza, se comentará acerca de cómo se distribuye de manera colectiva el documental independiente en EE.UU.

Las experiencias de este grupo de realizadores permitirán comprender las dinámicas en la distribución del documental, su inserción en espacios de promoción, plataformas, y canales de distribución. Las lógicas en las formas de colocar obras independientes están caracterizadas por las gestiones individuales, sin el respaldo de las principales empresas encargadas de la realización y distribución de las mismas.

Con el propósito de sumar experiencias, temáticas y propiciar debates en torno a fenómenos del ámbito audiovisual, en la última sesión teórica, la Universidad de Oriente acogerá la conferencia: “El documental como arte de la conciencia”, con la cual el cineasta y profesor Carlos Azpúrua aborda la función que este arte puede tener para movilizar opiniones, denunciar hechos y situaciones y promover un debate desde la responsabilidad social del realizador en temas de orden político, social, cultural, identitario…

En 1993, Santiago Álvarez recibe el Premio The Dallas Smyte por la Unión Democrática de Comunicaciones de los Estados Unidos al conjunto de su obra Cinematográfica, por su aporte a una comunicación democrática en el mundo.

La concepción del espacio teórico dentro de la programación del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez in Memoriam es un aspecto que reafirma la necesidad y el valor de este evento que alcanza ya una mayoría de edad y se consolida como el principal referente para el cine documental cubano e internacional.

XX Festival Internacional Santiago Álvarez: programa de conferencias

                                 

En cada edición del Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez in Memoriam no solo se exhiben decenas de documentales que narran parte de la historia de la humanidad. La ocasión también es propicia para el análisis, divulgación y diálogo sobre temas relacionados con el arte cinematográfico y el género documental.

Durante estos eventos teórico, a realizarse en la ciudad de Santiago de Cuba en el venidero mes de marzo, se reúnen con el público: documentalistas, críticos de arte, músicos, periodistas y reconocidas personalidades del séptimo arte y la cultura en general. Una conversación amplia y provechosa sobre diversos temas de la realidad contemporánea acompaña esta vigésima edición.

Programa de conferencias XX Festival /2023

Salón Biblioteca Elvira Cape

VIERNES 3 DE MARZO

  • Conferencia: El arte del documental”

Conferencista: Jorge Fuentes

Lugar: Sala Biblioteca Elvira Cape

Hora: 9 am a 11:00am

  • Conferencias: Tratamiento de la historia en la documentalística de Santiago Álvarez” y “Presencia martiana en la documentalística de Santiago Álvarez”. (panel)

Conferencistas: Dra. Aida Morales y Dra. Martha Fuente Labau

Lugar: Sala Biblioteca Elvira Cape

Hora: 9am/11:00am


SÁBADO 4 DE MARZO

  • Conferencia: Historia e imágenes de nuestra gente”

Conferencista: Gloria Rolando

Lugar: Sala Biblioteca Elvira Cape

Hora: 9 am a 11:00am

  • Conferencia: Influencia de la música cubana en la música latina de    New York”

Conferencista: Antonio Nadal y Boby Sanabria (músicos estadounidenses)

Lugar: Sala Biblioteca Elvira Cape

Hora: 11:15am /1pm


DOMINGO  5 DE MARZO

  • Conferencia: “José Antonio Aponte, el Precursor. El gran desconocido”

Conferencista: Heriberto Feraudy Espino

Lugar: Sala Biblioteca Elvira Cape

Hora: 9am/11:15am

  • Conferencia: “La producción colectiva comunitaria”

Conferencistas: Miembros del colectivo Meerkat Collective

Lugar: Sala Biblioteca Elvira Cape

Hora: 11:15/1pm


LUNES 6 DE MARZO

  • Conferencia: “El activismo feminista en la Cuba de hoy; metas y retos que se imponen”

Conferencista: Taïna Barthel González

Moderador: Frank Padrón

Lugar: Sala Biblioteca Elvira Cape

Hora: 11:15/1:00pm

  • Conferencia: “La distribución colectiva del documental independiente en EEEUU-una conversación”

Conferencistas: Pamela Sporn, Catherine Murphy, Jim Klein y Tony Heriza

Lugar: Sala Biblioteca Elvira Cape

Hora: 11:15am/1pm

Moderador: Frank Padrón